Ambos se complementan. Cuando la magnética mirada de Escorpio se fija en los ojos de Capricornio, éste, todo estabilidad y firmeza, nota que la tierra se abre bajo sus pies. Y a Escorpio le atraerá descubrir qué se esconde tras la máscara impasible y fría de Capricornio. Escorpio posee cualidades de Capricornio como la inteligencia y el tesón, pero incorpora su poderosa intuición. Eso favorece a Capricornio, que lo hace menos rígido y más flexible. Ambos son muy posesivos, por tanto, vivirán el uno para el otro. La convivencia con Capricornio es muy fácil. En los primeros encuentros sexuales, puede existir falta de comprensión. Escorpio es muy sexual; Capricornio, sin embargo, no muestra sus emociones y mantiene sus sentimientos bajo control. A Capricornio le asusta la fuerza de Escorpio, las sensaciones que lo embargan a su lado. Pero cuando se sienta seguro y confiado, dará rienda suelta a sus emociones y Escorpio se sentirá feliz a su lado.