Afrontemos diciembre llenos de planes, de ilusiones de futuro…
Es posible que finalicemos el año con la extraña sensación de que el tiempo ha transcurrido muy rápido, de que casi se nos ha ido de las manos y quizá no hemos logrado los objetivos que nos habíamos fijado.
Pero las cosas pueden cambiar, y en este último mes del año, si nos liberamos de lastres del pasado que pueden condicionar nuestro presente quizá todo adquiera un ritmo diferente que nos acerque a lo que nos habíamos propuesto.