Descubramos la compatibilidad que existe entre todos los signos del zodiaco, pero refiriéndonos en todo momento al signo solar, pues cada uno de los doce signos tiene una fuente diferente de poder y energía y, además, influyen en el momento del nacimiento la posición de los planetas, las doce casas y los aspectos.

Conocer la compatibilidad de los signos solares nos ayudará a comprendernos mejor, a entender nuestras grandes diferencias y a aceptarlas.

La relación será apasionante, paro nada tranquila. Las tempestades y la pasión estarán a la orden del día, y lo mismo se amarán locamente, viviendo instantes mágicos, que se odiarán con todo el fuego de sus corazones.  Eso sí, ninguno de los dos conoce lo que es el rencor y vivirán apasionadas reconciliaciones.

Relación difícil, pero fascinante. Tauro es tranquilo, sensorial. Leo, en cambio, es inquieto, triunfador. Ambos se admiran. Su vida sexual será apasionada. La vida al lado de Leo es una auténtica aventura y Tauro sabrá imprimir toda la voluptuosidad y sensualidad que enloquece a Leo.

Relaciones intensas donde las haya. Entre ellos existe un magnetismo y una  atracción muy fuertes. Ambos son muy intuitivos y comprobarán maravillados la facilidad que poseen para leerse el pensamiento. Géminis enseñará a Leo a bajarse del trono y Leo despertará en Géminis la necesidad de apasionarse por todo. 

Relación complicada, pero atractiva y fascinante si superan los roces iniciales. Leo posee una fuerza que Cáncer admira. Y Cáncer posee una sensibilidad e intuición que tanto gusta a Leo. Pero a Leo le inquieta el no poder traspasar el duro caparazón de Cáncer. En la unión sexual ambos pueden encontrar su verdadera identidad: Cáncer aporta sensualidad y poesía, y Leo, pasión y vehemencia.

Surge la pasión desde el primer momento, pero ambos son tan celosos y posesivos que lucharán por ser el centro de atención. Estos dos signos juntos pueden mover montañas. Vivirán el uno para el otro con un amor propio de las grandes novelas. Si logran superar las rivalidades, las relaciones sexuales pueden ser algo maravilloso y sensual.

La pasión de Leo seduce a Virgo, y a Leo la seguridad que le otorga Virgo hace que ambos sean capaces de desafiar al mundo entero. Serán una pareja perfecta si logran superar sus diferencias. Leo, por fin,  encuentra a alguien que lo admira y comprende, y Virgo se sentirá realmente protegido. En la sexualidad vivirán momentos de erotismo y pasión.

Una combinación fascinante. Leo aportará a Libra su fuerza y dinamismo y le ayudará a decidir. Juntos potenciarán la creatividad que ambos poseen. Ambos se toman la vida como algo lúdico, y saben aprovechar cada instante. La pasión entre ellos puede durar toda la vida. Libra aporta una sensualidad y una voluptuosidad que le confiere Venus, y Leo con una mezcla de romanticismo y pasión volcánica enloquece a Libra.

Entre ellos surge una atracción inmediata, pero la convivencia puede ser dura. Ambos, posesivos y celosos, intentarán dominar la relación. Es una relación reservada para los amantes de las emociones fuertes. Para que la relación llegue a buen puerto, Leo deberá entender el misterio que envuelve a Escorpio, quien aprenderá de Leo una forma de ver la vida más optimista y divertida que le hará disfrutar de manera más excitante.

Ambos son vitalistas, juguetones y saben como nadie gozar de la vida. Aunque tienen sus diferencias, ambos son tolerantes y aceptan esa forma diferente de ver la vida como algo que los enriquece. Leo tiene que comprender que sagitario es libre como el viento, que le encanta viajar y que necesita su espacio. Si logran armonizar sus diferencias, será un vínculo difícil de romper.

Son signos que poco tienen en común. Si Leo busca otra forma de ver la vida, Capricornio será su pareja ideal. A Capricornio le cautiva el optimismo y el carácter risueño de Leo y a Leo le asombra lo serio y responsable que es Capricornio. La expresión sexual puede alcanzar altos grados de pasión si Leo rodea el acto de un ambiente de ternura, romanticismo y magia.

Leo es apasionado, emocional, puro sentimiento. Acuario es su opuesto en el Zodiaco: razón, inteligencia y frialdad a la hora de tomar decisiones. Son el complemento ideal, de lo que Leo carece, Acuario lo posee, y al revés. Sentirán la atracción poderosa de los opuestos. Juntos brillarán: Leo aportará vitalidad y optimismo, y Acuario, su mente racional, su autocontrol y su tolerancia. Entre ellos la sexualidad funciona a tope. La química es tan magnética que produce fuertes dosis de amor, ternura, deseo y sensualidad.

La atracción entre ellos es tan fuerte que la relación funciona estupendamente. A Leo, tan protector, le encanta cuidar de su pececito, tan misterioso y huidizo. Mutuamente, se darán ternura y cariño por doquier. Leo será quien dirija la relación, y Piscis se dejará conducir dulcemente, aportando su magia y misterio. Pero la realidad es que, sin que se perciba de ello, será Piscis quien haga de Leo lo que él desea.