Los secretos de Escorpio
Su planeta regente: Sol
Su flor: Tulipan
Sus piedras: Amatista y Jade
Rasgos Positivos:
Sensible, magnético, creativo, misterios, intuitivo, inteligente
Rasgos Negativos:
Celoso, posesivo, rencoroso, introvertido
Cuando el Sol entra en el signo de Escorpio la naturaleza se prepara para una gran transformación. Es como si todo tuviera que ser destruido para renacer de nuevo en primavera. Escorpio anuncia que tras la muerte hay siempre un renacimiento. En torno a este signo hay un fascinante halo de misterio. Escorpio es un ser hermético, introvertido y difícil de conocer. Está dominado por un tumulto de pasiones, de deseos desenfrenados, de una capacidad emotiva en la que no conviene indagar nunca. Sufre interiormente y, en ocasiones, como su símbolo, el escorpión- dirige contra si su propio veneno.
Toda la intensidad de su pasión, Escorpio la dirige hacia las buenas obras o hacia aquello que considera que merece la pena. Su intensidad puede dañar si no la orienta bien. Es únicamente cuando estalla su violencia incontenible cuando puede causar la destrucción ajena y la suya propia.
Plutón y Marte son los planetas regentes de Escorpio. Plutón es el señor del inframundo, por lo que es lógico que a Escorpio se le asocie con el mundo de lo desconocido y, por lo tanto, temido. A Escorpio le gusta experimentar la vida y vivirla intensamente.
Le fascina la emoción, le atrae el misterio, los enigmas, y busca hasta descubrir con esa gran habilidad que solo él posee lo que hay dentro de cada ser.
Es dinámico, vital, atrayente, seductor. Sin embargo, su sombría irritación permanente puede acarrearle momentos tremendos en los que sus pasiones internas no le dejan descansar. En estas circunstancias crea una atmósfera incómoda a su alrededor y provoca cierto miedo en las personas que le rodean, que, inconscientemente, se apartan de él.
Es un signo de agua, sensible y muy intuitivo, pero también muy vulnerable, aunque, a diferencia de Cáncer y Piscis, los otros dos signos de agua, si se siente herido no se retirará, se revolverá y peleará con toda la intensidad de la que es capaz. Pero tienen que enfadar mucho a Escorpio par que salte y clave su mirada en la persona que le ha herido. Eso sí, si lo hace, nada le detendrá.
Es un ganador nato y no parará hasta conseguir el objetivo que se proponga. El espíritu de supervivencia de este signo es el más grande de todo el Zodiaco. Si se siente atacado, su defensa puede ser terrible. Él es implacable y frío. Nadie posee la implacable firmeza de Escorpio.
Escorpio conoce como nadie el aspecto más oculto del ser humano. Su mirada penetrante parece ir más allá de lo revelado. Él es intuitivo, perspicaz y posee la capacidad para entender al otro con una sola mirada. Tiene una gran sensibilidad y detrás de su fachada se esconde un alma noble y generosa. Quizá pueda achacársele el ser algo denso cuando entra en esos estados de cavilación, o ser a veces demasiado posesivo y absorbente en las relaciones.
Escorpio, como el ave fénix, muere para resurgir. Él sabe que por mucho que deseemos que ciertos momentos se prolonguen para siempre, llega esa fase inevitable del cambio que nos indica el final y nos empuja a la oscuridad. Pero Escorpio sabe desenvolverse perfectamente en esas situaciones porque es consciente de que después de la muerte siempre hay un renacimiento. Por ello, él acepta su destino porque tiene la seguridad de que va a renacer de nuevo.
Escorpio es un auténtico misterio, magnético y peligrosamente atractivo. Con su mirada, profunda y directa, es capaz de hechizar a quien se proponga. Es intenso, complejo y sensible. Adora el misterio y la intriga, y si le engañan lo detectará inmediatamente y no lo perdonará. Jamás olvidará el daño que puedan hacerle y si se siente traicionado, puede ser cruel y vengativo.
Su magnética mirada es su principal arma de seducción. Si te mira, notarás una mezcla de deseo y miedo que te atraerá irremediablemente. Dicen de Escorpio que es el mejor amante del zodiaco y el más apasionado sexualmente. Él vive el amor de una forma atormentada y apasionada. A través de la sexualidad canaliza toda su energía, libera sus emociones y toma contacto con sus pasiones más primitivas.
Le cuesta mucho amar. Él se sumerge en el laberinto de pasiones, a las que se entrega con gran vehemencia para comprobar que no siente precisamente ese amor que busca desesperadamente y le resulta tan difícil encontrar.
Necesita poseer plenamente a la persona que ama, pero cuando lo consigue se vuelve frío y distante, creando una atmósfera extraña en la que su pareja se siente perdida, sin saber qué está ocurriendo. Y es que cuando Escorpio ama, es tan intenso que deja al descubierto el volcán de sus sentimientos. Cuando ama, muere para entregarle al otro toda su energía en estado puro. Así es de intenso y de inolvidable.
Le fascina la conquista, descubrir todo lo que ocultas y si le resultas inalcanzable lo volverás completamente loco. Jamás te sometas completamente a él, posee un carácter muy dominante y te absorberá totalmente.
Aunque parezca impasible, es enormemente sensible al amor en todas sus manifestaciones. Detrás de esa máscara de frialdad se esconden unos sentimientos muy profundos que rara vez afloran, pero, cuando lo hacen, son tan intensos que sentirás que el mundo se abre a tus pies.
Desafíalo, pero sé muy honesto y no juegues con él, porque Escorpio descubrirá tu juego antes siquiera de haberlo iniciado.
Escorpio te conducirá a las pasiones más tortuosas, al deseo atormentado de la posesión y jugará a entregarse solo a medias para, en un momento determinado, descubrirte una parte de él totalmente irracional y primitiva que te envolverá en una locura de sensaciones.
Así es Escorpio de intenso y de inolvidable.