Solo tienes que adoptar una actitud que favorezca la llegada de lo que anhelas. Nuestra vida puede cambiar si  cambiamos nuestra forma de pensar porque al hacerlo emitimos una frecuencia distinta al universo y todo puede dar un vuelco inesperado. Ésta es la Ley de atracción, según la cual los pensamientos positivos atraen riqueza, salud, felicidad y relaciones.

Lo principal es definir nuestro objetivo con claridad y visualizarlo como algo que se ha cumplido ya, como si realmente ya tuviéramos los que anhelamos. Si queremos encontrar un empleo, por ejemplo, imaginemos el lugar de trabajo, cómo es el ambiente, cómo son los compañeros? La fuerza del pensamiento es impresionante. Por ello, hay que convertir la meta que deseamos lograr en el centro de nuestro pensamiento y tratar de visualizarla como ya cumplida varias veces al día, en cualquier momento: mientras caminamos, comemos, nos vestimos?

Porque lo cierto es que, nos demos cuenta o no, siempre estamos pensando. Para la mayoría, el único momento en el que no pensamos es cuando dormimos. Sin embargo, la Ley de la atracción sigue funcionando con el último pensamiento antes de ir a la cama. Asegurémonos entonces de que nuestros últimos pensamientos antes de dormir sean optimistas y constructivos.

Es fundamental pensar en positivo. Rechacemos de nuestra mente los pensamientos que enturbian nuestro deseo porque, de alguna forma, actúan como una barrera que dificulta que llegue lo que tanto anhelamos. Hay que formular siempre afirmaciones para enfocar la meta que queremos lograr y evitar pasar más tiempo pensando en lo que no queremos que en lo que realmente queremos. Si necesitamos que nuestra economía mejore, pongamos por caso, debemos decir ?Deseo contar con más dinero para mis gastos?, en lugar de ?No quiero tener más problemas económicos?.

También te ayudará anotar tu objetivo en un cuaderno o cartel y leerlo asidua y repetidamente para no perderlo de vista y favorecer que se haga realidad. Aquello en lo que pensamos más a menudo, aquello que más enfocamos es lo que llegará a nuestra vida: nuestro pensamiento se convierte en cosas.

Lo que deseamos aparecerá en nuestra vida si lo invocamos a través de pensamientos persistentes. Todo lo que nos rodea, incluyendo las cosas de las que nos quejamos constantemente, las hemos atraído de alguna manera. Por eso es tan importante saber qué estamos pensando. Cuando nos sentimos mal, es complicado tener buenos pensamientos. Para cambiar esta frecuencia negativa que podemos estar emitiendo al Universo nos ayudará evocar algún recuerdo querido y agradable, escuchar nuestra música favorita, estar en contacto con la naturaleza? Cualquier cosa que nos haga sentirnos bien y nos ayude a pensar en positivo para atraer cosas buenas a nuestra vida.

En realidad, tenemos que ser conscientes de que somos nosotros mismos los que escribimos el guion de nuestra vida. Por ello, es necesario que eliminemos de nuestra mente esos pensamientos limitantes que  nos impiden conseguir lo que queremos. El objetivo es sentirnos bien con nosotros mismos y amar lo que hacemos para atraer así una avalancha de cosas buenas a nuestra vida.