Noche mágica para soñar
La lluvia de las Perseidas, también conocida como las "Lágrimas de San Lorenzo" por la proximidad de su máxima actividad con la festividad de este santo, es la lluvia de estrellas que todos los veranos nos invita a mirar al cielo. Se trata de los restos del cometa Swift-Tuttle, cuya órbita atraviesa la Tierra todos los años a mediados de agosto.
El mejor momento para observar esta mágica lluvia de estrellas será después de medianoche.
Cuando cae la noche, empezamos a sentir una fuerte conexión con los misterios del Universo. Lo cierto es que hay algo reconfortante, misterioso y enigmático al contemplar todo un dosel de estrellas. En el calor del verano, dejemos que el silencio y el remolino de estrellas nos carguen de energía y no perdamos ni un momento de la pantalla celeste.
Podamos visualizar o no la lluvia de estrellas, su energía se dejará sentir en nosotros. Por ello, es una noche perfecta para limpiar las malas energías y en la que algunos de nuestros deseos pueden comenzar a hacerse realidad.