Día positivo, preludio de algo mágico.
Cerramos un ciclo y abrimos otro cargado de nuevas ilusiones. Terminamos el año con una Luna en el signo de Virgo, que nos va a aportar energía para no depender del entorno y superar cualquier limitación con el fin de alcanzar nuestros objetivos deseados.
El fin de año es un momento de transición: finaliza un ciclo y comienzo uno nuevo. Las energías cambian y comprender en qué consiste el cambio nos ayuda a ubicarnos.
Recibamos el 2016 sintiéndonos dueños de nuestros sueños y llevemos a cabo algún ritual para comenzar el nuevo año con mucha suerte.
¡Feliz Año Nuevo para ti!