Entras en el año de la Serpiente con un ritmo lento, pero firme, consciente de que si te precipitas y resuelves tus asuntos demasiado rápido puedes dejarte cosas en el camino.
Año ideal para redefinir tus relaciones personales, construir vínculos afectivos sólidos y dejar fuera de tu camino a esas personas que no han sido honestas o leales contigo.
Para resolver las dificultades y tus luchas internas te conviene prestar atención a tus intuiciones, que nunca fallan, y escuchar tu voz interior.
Tú, que eres pura pasión, sentimiento, intuición…, este año vas a disfrutar de un torrente de ideas nuevas e ingeniosas que van a repercutir muy positivamente en tu vida.
En el año de la Serpiente te dejarás sorprender por el destino y no vas a pasar por alto todas esas sensaciones que estás sintiendo y que te dan más alas para seguir soñando.