El mes se estrena con el Cuarto Menguante en tu signo, el día 1, que te aporta una gran intuición y estabilidad emocional para que puedas materializar tus sueños. Los miedos que te han podido atenazar desaparecen y, por fin, comienzas a brillar y la vida te recompensa. Es tiempo de adentrarte en nuevos caminos y tomar el rumbo que deseas. Aprovecha este regalo del Cosmos.
Este mes tendrás claro lo que deseas tener en tu vida y te resultará más fácil llevar a cabo tus propósitos. Y si las cosas no salen a la primera, no tendrás reparos en cambiar de táctica porque intuyes que las circunstancias acabarán por beneficiarte, especialmente a partir del día 25, cuando comenzarás a recibir los buenos aspectos de Júpiter y sentirás que la diosa fortuna vela por ti en todos los ámbitos de tu vida.
La última Luna Llena de la primavera, el día 23, activa el sector de los amigos, y a través de ellos pueden llegar cosas positivas a tu vida.